#1
Tres meses en una isla privada.
Dos hombres.
Un millón de dólares.
Todo lo que tengo que hacer es domesticar a Nash Wilde.
Han pasado dos años desde que mi hermana y su novio murieron en un accidente aéreo. La última persona que esperaba que apareciera en mi puerta era su padre, Alistair Wilde. Sin embargo, vino con una oferta que sería una idiota si la dejara pasar: ser la novia de su hijo durante tres meses, vivir con los dos en una casa remota y el millón de dólares es mío.
El desafío resulta ser más difícil de lo que esperaba. Nash no solo es salvaje, es peligroso. Y Alistair está mucho más roto de lo que deja creer al mundo. Los tres estamos atados por el dolor. Depende de mí alimentar el hambre de Nash y curar el dolor de Alistair.
Las líneas están cruzadas.
Se rompen las reglas.
En la isla, no hay nadie que nos diga que esto está mal.
Sé que tengo que elegir antes de destrozar a esta familia.
Pero pertenezco a los dos...
Uno de ellos tiene mi cuerpo.
El otro tiene mi corazón.
He superado lo que ocurrió en Del Rey y he mantenido el secreto de lo que hice -lo que hicimos- enterrado en lo más profundo. Pero me temo que nunca superaré lo que ocurrió seis meses después en Ámsterdam.
Cuando Ellis Prior, un viejo amigo de mi padre, volvió a entrar en mi vida, nos hicimos amigos rápidamente, y me mostró cosas que no puedo olvidar, cosas que me pusieron de rodillas. Pero me alejé de esa vida y nunca miré atrás.
Han pasado tres años, pero ya no puedo ignorarlo.
Despertó un hambre dentro de mí.
Un anhelo de algo nuevo.
Algo poderoso.
Ahora Hanna Thurber está en Del Rey buscando un lugar para escapar, y yo estoy demasiado ansiosa por proporcionárselo. Esta bailarina es todo menos delicada, y la química entre nosotros es eléctrica.
Pero el pasado no permanece muerto, y Ellis Prior también encuentra su camino a la isla. De repente, hay algo que nos une a los tres. Lo que empieza siendo inocente y divertido se convierte en una atracción innegablemente prohibida.
En la isla no hay secretos.
Sólo estamos nosotros.
Y la verdad que ya no puedo ignorar.
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